Las personas migrantes representan entre el 12% y el 14% de la población española. Sin embargo, hasta el 40% de los nuevos casos diagnosticados se dan en personas procedentes de otros países, principalmente en pacientes llegados de América Latina y África subsahariana, según ha explicado a EL CORREO el nuevo presidente de SEISIDA, José Antonio Pérez Molina, que ha sido elegido para el cargo ayer, miércoles, en Bilbao.

“La gran mayoría de toda esta enfermedad corresponde a infecciones que se han producido aquí, en nuestro territorio. Aunque sólo sea por egoísmo, deberíamos adoptar medidas para un mejor control de las infecciones en la población migrante”, afirma el infectólogo, coordinador del Centro Nacional de Enfermedades Tropicales del hospital Ramón y Cajal de Madrid.
Las cifras varían según el país de origen. Hasta el 75% de los casos detectados entre personas procedentes de América Latina corresponden a infecciones ocurridas en Europa. Entre los pacientes de los países subsaharianos, con mayor incidencia de VIH/SIDA, la mitad proceden de Europa. Ambos revelan, según los expertos, la necesidad de una intervención sanitaria que incluya prevención y terapia.
“La mayoría de las personas migrantes son jóvenes y sanas. No importa si tienen papeles o no. Nadie viene en un barco para hacer turismo sanitario. Si queremos controlar la epidemia, debemos tratarlos como a todos los demás”, dijo Pérez Molina.