Kifkif celebra la aprobación de la Ley trans en el Congreso, un gran paso para los derechos de las personas trans migrantes

- El director de la organización de defensa y representación de las personas LGTBI migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo en España, Samir Bargachi indica el gran trabajo de los colectivos trans, destacando que no íbamos a permitir que las personas trans migrantes se quedaran fuera de la ley.
La Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI, llamada Ley Trans, ha sido finalmente aprobada hoy en el pleno del Congreso. Queda su ratificación en el Senado, que se prevé para el próximo mes de febrero y la vuelta al Congreso para su aprobación final y entrada en vigor.
Samir Bargachi, director de Kifkif, es claro: no íbamos a permitir que las personas trans migrantes se quedaran fuera de la ley consolidando nuestro mayor temor: el nacimiento de dos comunidades LGTBI desligadas; una de primera clase, con derechos, y otra, la de los márgenes.
Kifkif ha estado muy presente en la tramitación de esta ley desarrollando argumentarios, trabajando en las enmiendas, y en permanente contacto con los distintos grupos parlamentarios, cumpliendo su compromiso con las personas trans migrantes y solicitantes de asilo, trabajando por la protección de sus derechos.
Hemos estado en las calles, trabajando en coordinación con otras entidades del colectivo LGTBI y manteniendo reuniones con los grupos parlamentarios. Hemos estado donde había que estar, porque nos iba la vida en ello.
Samir bargachi, director de kifkif
Kifkif celebra la aprobación de esta ley tan esperada y trabajada, y que va a mejorar la vida de muchas personas. También desde la organización se es consciente de que el texto de la Ley es mejorable, considerando que habrá que esperar a su implementación y certificar si las personas trans migrantes puedan llevar a efecto la rectificación registral de su nombre y sexo para la adecuación de los documentos expedidos en España con todas las garantías.
Aún así, para Kifkif son muchos los retos que quedan pendientes: permitir a las personas no binarias la omisión relativa al sexo en sus documentos oficiales – muchas de ellas también personas migrantes -, tipificar como delito penal las terapias de conversión, o la libre autodeterminación de la infancia trans.