Los cubanos aprobaron por abrumadora mayoría el Matrimonio Igualitario y la adopción en un referéndum respaldado por el gobierno el domingo, que también impulsó los derechos de las mujeres, dijo el lunes la comisión electoral nacional.
Más de 3,9 millones de votantes votaron a favor de la ratificación del código (66,9%), mientras que 1,95 millones se opusieron a la ratificación (33%), dijo el lunes en la televisión estatal Alina Balseiro Gutiérrez, presidenta de la comisión.
“Se ha hecho justicia”, tuiteó el presidente cubano Miguel Díaz-Canel.
“Se salda una deuda con varias generaciones de cubanos y cubanas, cuyos proyectos familiares llevaban años esperando esta ley”, dijo.
El “código de familia”, de 100 páginas, legaliza el Matrimonio Igualitario y las uniones civiles, permite a las parejas del mismo sexo adoptar niños y promueve el reparto equitativo de los derechos y responsabilidades domésticas entre hombres y mujeres.
Los resultados preliminares de la comisión electoral mostraron que el 74% de los 8,4 millones de cubanos con derecho a voto participaron en el referéndum del domingo.
No hay observadores independientes en las elecciones cubanas, aunque la ciudadanía puede observar el recuento en sus circunscripciones. Los informes locales dispersos sobre los recuentos de las circunscripciones en las redes sociales parecían coincidir con los resultados oficiales.
El anuncio de los resultados se produjo mientras Díaz-Canel presidía una reunión de emergencia mientras la isla caribeña se preparaba para el paso del huracán Ian por su extremo occidental a primera hora del martes.
Las cuentas oficiales de Twitter mostraron que la sala estallaba en aplausos y que el presidente se inclinaba hacia atrás y sonreía ante la noticia. El presidente cubano encabezó la campaña para la adopción del código.
Para los estándares cubanos, la participación del domingo fue relativamente modesta, y un 33% de votos negativos en el país comunista, donde en anteriores referendos la posición del gobierno ha recibido una aprobación casi unánime.
La disidencia es tanto un indicio de cómo está cambiando Cuba como de las actuales circunstancias económicas, que han provocado largos cortes de electricidad y colas para conseguir alimentos, medicinas y combustible.
La votación del domingo fue también la primera de este tipo desde que la mayoría de los residentes tienen acceso a Internet, lo que ha permitido una mayor difusión de las opiniones discrepantes.