Ahmed (nombre ficticio) es un estudiante de comunicación audiovisual de Senegal que tuvo que escapar de su país por ser homosexual. Tras sufrir el rechazo de su familia y una agresión física, decidió arriesgar su vida y embarcar en un cayuco rumbo a España, donde espera obtener el asilo y poder vivir con libertad.
Su travesía duró seis días, en los que solo comió un puñado de galletas y soportó el frío y el agua que se filtraba en la embarcación. Llegó a la isla de El Hierro junto a otras 257 personas, en medio de una crisis migratoria sin precedentes en la Ruta Atlántica.
Ahmed contó su historia a Efe para denunciar la situación de las personas LGBT+ en Senegal, donde la homosexualidad es ilegal y se castiga con hasta cinco años de prisión. Además, en las últimas semanas se han registrado casos de represión y ataques homofóbicos, mientras el presidente del país niega que haya homofobia y defiende la prohibición de la homosexualidad por razones culturales.
Ahora, Ahmed vive en Sevilla, a la espera de una cita para solicitar asilo. Lleva dos meses en España y se siente protegido y respetado. Su sueño es continuar sus estudios y encontrar el apoyo y la aceptación que necesita.
