Según el último boletín de la Unidad de Vigilancia KAI, en lo que va de 2023 se han registrado 42 asesinatos de personas de las disidencias sexuales, una cifra que podría aumentar antes de finalizar el año.

La Unidad de Vigilancia KAI, integrada por organizaciones de la sociedad civil que defienden los derechos de las personas LGBTIQA+, denunció el incremento de la violencia contra esta población en Honduras, que históricamente ha sido marginada y estigmatizada.

De las 42 víctimas mortales, 11 eran hombres gais, una hombre bisexual, cinco mujeres lesbianas, 12 mujeres trans y un hombre trans. Además, hubo 12 casos de personas cuya orientación sexual o identidad de género no se pudo determinar.

La mayoría de los crímenes ocurrieron en el departamento de Francisco Morazán, con 17 casos, seguido de Atlántida, con cinco, y Choluteca, con cuatro. El resto se distribuyó entre otros siete departamentos y cuatro casos sin ubicación conocida.

Dany Montesinos, coordinador de la Asociación Kukulkán, una de las entidades que conforman la Unidad de Vigilancia KAI, advirtió que la situación podría empeorar, ya que los datos presentados son hasta el cierre de noviembre. Asimismo, indicó que no todos los casos de muertes violentas de personas LGBTIQA+ se registran como tal, debido a la falta de información de las familias o de un protocolo de investigación adecuado.

Montesinos señaló que el boletín les permite tener una visión del panorama de situación que viven las personas LGBTIQA+ en Honduras y hacer incidencia con las autoridades estatales para orientar las políticas públicas que les permitan atender la situación de violencia.

También informó que, en el registro de la Unidad KAI, al menos tres personas se encuentran desaparecidas, entre ellas Cristina Portillo, líder trans de 38 años, que fue vista por última vez el 24 de noviembre en San Pedro Sula.

Además de las muertes violentas, las personas LGBTIQA+ se enfrentan a la violencia generalizada, que se expresa a través de la discriminación y los discursos de odio. Jeslyn Casco Ávila, asesora legal de la Asociación Kukulkán, calificó de “preocupante” el aumento de los casos de violencia generalizada, que en 2023 sumaron 227, de los cuales la mayoría quedaron en impunidad.

De 2004 a 2022, la Unidad de Vigilancia KAI registró 468 muertes violentas de personas LGBTIQA+, de las cuales 48 eran mujeres lesbianas, 281 hombres gais, tres hombres bisexuales y 132 mujeres trans.

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#PorEstoEscapamosHonduras: un año negro para las personas LGBTIQA+, con 42 muertes violentas y tres desapariciones