Bonnie Bleskachek es una mujer que ha hecho historia en el mundo de los bomberos. En 2005, se convirtió en la primera jefa de bomberos abiertamente lesbiana de una gran ciudad, Minneapolis, en Estados Unidos. Su nombramiento fue celebrado como un hito para la diversidad y la inclusión en un ámbito tradicionalmente dominado por hombres heterosexuales.
Bleskachek se unió al departamento de bomberos de Minneapolis en 1989, cuando solo había otras tres mujeres en el cuerpo. A lo largo de su carrera, tuvo que enfrentarse a numerosos casos de discriminación y acoso por su género y su orientación sexual. Según su abogado, algunos bomberos varones la ignoraban, la insultaban o incluso la agredían físicamente (NBC News, 2006a).
A pesar de las dificultades, Bleskachek ascendió en el escalafón hasta llegar a la cima. Su trayectoria fue reconocida por el alcalde de la ciudad, R.T. Rybak, quien la eligió como jefa de bomberos en 2005, entre 21 candidatos. Bleskachek tenía entonces 43 años y era la única jefa de bomberos lesbiana de una gran ciudad estadounidense.
Sin embargo, su mandato se vio empañado por una serie de demandas de otros bomberos, que la acusaban de acoso y discriminación. Tres bomberas afirmaron que Bleskachek les había negado oportunidades de formación y ascenso por motivos personales o sexuales. Una de ellas, su ex pareja Jennifer Cornell, alegó que Bleskachek había suspendido un examen para promocionar a jefe de batallón después de que ella lo aprobara, pero no así la actual novia de Bleskachek. Otra investigación de la ciudad encontró evidencias de que el departamento había dado un trato preferente a las lesbianas o a las que socializaban con ellas (NBC News, 2006b).
Bleskachek negó las acusaciones, pero finalmente acordó renunciar a su cargo de jefa de bomberos en 2006, tras perder la confianza del alcalde y del consejo municipal. Su acuerdo de salida incluía una reasignación como jefa de batallón y una posterior solicitud de descenso a capitana. Dos de las demandas se resolvieron fuera de los tribunales, pero la tercera siguió su curso hasta 2009, cuando un jurado falló a favor de Bleskachek.
Bleskachek continuó trabajando en el departamento de bomberos de Minneapolis hasta 2018, cuando se retiró. Durante su carrera, también fue cofundadora de la Asociación de Mujeres Bomberas de Minnesota, una organización que promueve el liderazgo y el apoyo de las mujeres en el servicio de bomberos.
Bleskachek es una figura controvertida, que ha generado admiración y rechazo a partes iguales. Para algunos, es una pionera que abrió el camino a otras mujeres y personas LGTBI en el mundo de los bomberos. Para otros, es una persona que abusó de su poder y creó un ambiente hostil en su departamento. Sea como sea, su historia es parte de la historia LGTBI, y merece ser contada.