El 8 de enero de 2011, un día como hoy hace 13 años, la congresista estadounidense Gabrielle Giffords fue herida de gravedad en un tiroteo masivo en Arizona. El autor del ataque, Jared Lee Loughner, disparó contra Giffords y otras 18 personas que asistían a un evento público organizado por la congresista en el estacionamiento de un supermercado. Seis personas murieron, entre ellas el juez federal John Roll y una niña de 9 años. Muchas otras resultaron gravemente heridas, incluida Giffords, quien recibió un disparo en la cabeza a quemarropa.
En medio del caos y la tragedia, un joven de 20 años se convirtió en un héroe. Se trataba de Daniel Hernández Jr., el becario abiertamente gay de Giffords, quien ayudó a salvar la vida de su jefa. Hernández, que llevaba solo cinco días trabajando con Giffords, corrió hacia donde estaba la congresista y le aplicó primeros auxilios. Le sostuvo la cabeza, le levantó el pecho para que no se ahogara con la sangre y le hizo presión sobre la herida para reducir el sangrado. También le habló para mantenerla consciente hasta que llegaron los servicios de emergencia. Después, contactó con el esposo de Giffords para informarle de lo ocurrido.
Gracias a la rápida y valiente actuación de Hernández, Giffords sobrevivió al atentado, aunque tuvo que someterse a varias cirugías y a un largo proceso de recuperación. Hernández fue reconocido por su heroísmo por el presidente Barack Obama, quien lo invitó a asistir al discurso del Estado de la Unión de 2011. También recibió el Premio al Valor del Departamento del Interior y el Premio al Servicio Público de la Universidad de Arizona, donde estudiaba ciencias políticas.
Hernández, que es de origen latino, se identifica como gay desde los 13 años. Ha sido un activista por los derechos de la comunidad LGTBI y ha trabajado en campañas políticas de candidatos demócratas. En 2011, fue elegido para la junta directiva del distrito escolar de Sunnyside, donde se enfrentó a una campaña de desprestigio por su orientación sexual. En 2016, fue elegido para la Cámara de Representantes de Arizona, donde fue uno de los tres miembros abiertamente gays y cofundador de la bancada LGTBI. En 2021, anunció su candidatura al Congreso de Estados Unidos por el distrito 6 de Arizona, pero perdió en las primarias demócratas.
La historia de Daniel Hernández Jr. es un ejemplo de valentía, compromiso y servicio público. Su intervención en el tiroteo de 2011 salvó la vida de una congresista y le valió el reconocimiento nacional. Su trayectoria política ha sido una inspiración para la comunidad LGTBI y para las personas de origen latino. Su legado forma parte de nuestra historia LGTBI.